
Don German Leiva es un villalemanino de corazón, pero qué por motivos laborales, en el año 1982, decide emigrar de Chile, y con maleta y sueños, se va a los Estados Unidos.
Tuvo la oportunidad de salir de su país, teniendo esta gran posibilidad que no quiso desaprovechar, por el bien de sus hijos también, ya que su familia queda en Chile, y el viaja, sin olvidarse jamás de sus orígenes y ayudando desde allá a su familia económicamente en cuanto pudo.
Me cuenta que vivir en el extranjero no es fácil, el tema de la adaptación, el idioma, y que nunca se deja de extrañar, y cuando más se recuerda es en las fiestas de fin de año, y sobre todo en fiestas patrias, para quien ama a su tierra.
Hizo vida en Estados Unidos, fueron 44 años, trabajando en una buena empresa, estando allá creó dos grupos folklóricos, con integrantes chilenos radicados allá, y extranjeros que deseaban saber de nuestras raíces.
Don German me cuenta, regresa a su país, nuestro país, y decide armar un grupo, y piensa ¿por qué no con adultos mayores?.
Realiza talleres de Folklore en la Oficina del Adulto Mayor, lo cual lo acerca a la gente, terminado su trabajo ahí, decide continuar de manera independiente con una agrupación propia, y es ahí cuando crea Raíces del Folklore en Villa Alemana, una agrupación independiente y sin fines de lucro.
Nos cuenta de lo maravilloso que ha sido esta experiencia en Chile, de poder aportar sus conocimientos con la danza, y más aún con personas mayores de setenta años como él. Me cuenta que los adultos mayores necesitan tanto estos espacios, el sentirse activos, útiles a la sociedad, que se les tome en consideración, y que ciertamente, el arte a través de la danza para ellos es vida al alma.
Cuando le pregunto ¿Qué era aquello que más lo motivaba a regresar a Chile? y con emoción recuerda que trabajando allá, soñaba con formar un grupo grande de personas mayores bailando cueca, y él también soñaba con un traje de huaso con espuelas, y se veía feliz en ese sueño, sin lugar a dudas que lo que sueñas creas, y que no hay edad para cumplir los sueños, y al parecer la experiencia siempre es la madre de todas las ciencias, ya que este “Gringo” Chileno cumplió su sueño.
Hoy a sus 73 años, se mantiene con salud y vitalidad, incluso se casó hace poco tiempo, con una destacada cantante de la comuna, y quiere vivir muchos años, para seguir disfrutando del baile y del gran amor que encontró en esta primavera de su vida. Historia de Mujer por Julieta Saavedra.